La capital de Polonia cuenta con una «inmerecida» mala reputación, esto es debido a que muchos turistas la tildan de ser una ciudad con poco que visitar. Sin embargo, es una ciudad que a nosotros nos ha encantado y nos ha sorprendido. Por ello, hemos creado este post con los imprescindibles de Varsovia. Y es que, Varsovia, tiene mucho que ofrecer.
Después de haber sido destruida casi en su totalidad durante la Segunda Guerra Mundial, ha tenido que reconstruirse para volver a ser ciudad. Hoy en día es una ciudad de contrastes, donde la riqueza histórica se funde con el dinamismo actual.
PALACIO DE CULTURA Y CIENCIA
Es el edificio más alto de Polonia y un icono de la ciudad. Este edificio socialista-realista es visible desde casi todos los rincones de la capital. Alberga teatros, un cine y museos. Se puede subir al mirador de la planta 30 para disfrutar de unas vistas panorámicas de Varsovia, que incluyen espectaculares rascacielos y las dos orillas del Vístula.
STARE MIASTO
Reconstruida tras la Segunda Guerra Mundial e incluida en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, la Ciudad Vieja impresiona por la belleza de sus fachadas coloridas. Pasea por la Plaza del Mercado de la Ciudad Vieja, hazte una foto en la estatua de la Sirena, visita el Museo de Varsovia y entra en la catedral del siglo XIV y el Castillo Real de estilo barroco-clasicista.
PLAZA DEL CASTILLO
También conocida como plac Zamkowy es una de las plazas con más historias de Varsovia, pues en ella es donde se celebraron y se celebran la mayoría de eventos de la ciudad.
Esta plaza debe su nombre al Castillo Real, situado en un lateral de la misma y que fue la residencia del rey polaco. Aunque el castillo original fue destruido durante la guerra, hoy en día en su interior se exponen numerosas obras de arte que datan de esa época.
En el centro de la plaza se encuentra la Columna de Segismundo III, el responsable de trasladar la capital de país de Cracovia a Varsovia.
Es muy recomendable subir al mirador que se encuentra en una de las esquinas de la plaza y que recibe el nombre de “Taras Widokowy na dzwonnicy kościoła św. Anny”. La entrada son 10 PLN por persona y las vistas 360 grados, son increíbles.
BARBACANA
El casco histórico de Varsovia estuvo rodeado, en el siglo XV, por una muralla medieval. Con ello, se levantó también un bastión defensivo que servía de torre de vigilancia y como puerta principal de acceso al centro histórico. Hoy en día lo que queda se puede visitar en la Barbacana que, aunque durante la Segunda Guerra Mundial fue destruida casi en su totalidad, se reconstruyó utilizando los ladrillos originales que se pudieron recuperar entre los escombros.
PEQUEÑO INSURGENTE
Justo en uno de los laterales de la Barbacana, se encuentra el monumento al Pequeño Insurgente. Un símbolo que recuerda a todos los niños que tuvieron que revelarse y participar en el Alzamiento de Varsovia.
BARRIO DE PRAGA
Durante y después de la 2ªGM esta parte de la ciudad no fue destruida. A pesar de varios planes, no se ha industrializado tampoco, lo que permitió que el distrito conservan gran parte de su carácter original, tranquilo y pacífico. Es incluso posible encontrarse fachadas con agujeros de balas. La calle Mała fue además escenario de diversas películas ambientadas en la Varsovia de preguerra como “El Pianista” de Roman Polański.
En la actualidad hay nuevas áreas con bloques de lujo de los complejos de apartamentos de la zona, pero las autoridades no planean construir más casas y desea que el carácter rústico se conserve.
Algunos de los espacios renovados postindustriales son: Praga Koneser Center, con el Museo del Vodka Polaco, y Soho Factory, con el Museo del Neón. Además se puede visitar el Museo Praga de Varsovia, donde conocerás la historia del distrito.
MUSEO DEL ALZAMIENTO
Este innovador museo del alzamiento conmemora el Levantamiento de Varsovia de 1944. Podrá conocer su historia, escuchar los relatos de los insurgentes sobre los dramáticos acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial, ver la réplica del bombardero Liberator y contemplar la animación en 3D «Ciudad de las ruinas», que representa la Varsovia destruida.
MUSEO POLIN
El museo POLIN restaura la memoria de la rica historia de mil años de los judíos polacos. Preste atención a la arquitectura única de la sala principal, deténgase en la bóveda reconstruida de la sinagoga del siglo XVII de Gwozdziec y vea la exposición interactiva que le llevará en un viaje a través de los siglos.
PALACIO DE WILANOW
La perla barroca de Varsovia, también conocido como el “Versalles polaco”, fue la residencia de verano del rey Jan III Sobieski. Forma parte de la “ruta real” de Varsovia y sus jardines son un lugar ideal para pasear (mejor en los días soleados). Además, es uno de los pocos edificios de la ciudad que aguantaron a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
Como has podido comprobar en estos imprescindibles de Varsovia. La capital polaca es una ciudad en la que incluso un día para visitarla te sabrá a poco. Si continúas explorando el país, visitando Auschwitz o la ciudad de Cracovia, te ayudamos con estos post.