La gasolinera de Solitaire, se ha convertido en una parada imprescindible si viajas a Namibia. En este post os contamos todo lo que necesitáis saber de este icónico enclave.
Si vienes de visitar Sossusvlei y su famoso Deadvlei, la parada en la Solitaire es obligatoria.
Solitaire, es un pequeño asentamiento que se encuentra cerca del parque nacional Namib-Naukluft. Es especial porque, durante muchos años, fue la única opción para abastecer a los viajeros en el trayecto entre Sossusvlei y la capital Windhoek.
A día de hoy, con ningún otro pueblo a kilómetros de distancia, y siendo la única gasolinera en la que repostar entre las dunas de Sossuvlei y la Costa de Walvis Bay, se ha convertido en una parada muy famosa entre los turistas.
Sin embargo, esta no es la única razón para visitarla. Aparte de una gasolinera, cuenta con un campamento, un hotel y un taller mecánico. En este taller es muy fácil ver cómo gran multitud de viajeros, recurren a él debido a las imperfecciones de las carreteras namibias. Además, es curioso observar cómo, con tan pocos recursos, se las apañan perfectamente para solucionar los diferentes problemas.
En sus inmediaciones, también hay una oficina de correos, en la que no solo ofrecen servicio postal, sino que además cuenta con una pequeña zona de souvenirs y un mini-supermercado. Aquí puede ser una buena opción comprar garrafas de agua para el camino a Walvis Bay.
Pero, sin lugar a duda, la joya de Solitaire es su panadería, esta se ha hecho famosa por hacer la mejor tarta de manzana de todo el país, e incluso dicen que de toda África. Nosotros la degustamos y podemos decir, sin ser expertos en tartas, que está deliciosa. También probamos la meat pie, y estaba bastante buena.
Otra de las cosas más llamativas de Solitaire, son los coches antiguos que se encuentran situados a la entrada (donde te puedes subir y hacerte fotos). Esto, añadido al paisaje desértico que lo acompaña, lo convierten en un lugar de lo más peculiar. Además, entre los coches abandonados, se encuentran familias de suricatos que viven en sus madrigueras y se dejan ver con facilidad comiendo principalmente el famoso melón del desierto.
Para llegar hasta aquí, la carretera no es complicada y el lugar, en medio del desierto del Namib, no es difícil de encontrar. De todas formas, te recomendamos marcarlo en el mapa para no perdértelo.
Si quieres conocer más sobre nuestra vivencia en la zona, te animamos a que leas nuestra experiencia en itinerario por Namibia.